• 14 de Diciembre

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La abolición del cambio horario es una tendencia mundial

82% de ciudadanos europeos aprueba terminar con los cambios horarios, mientras que reciente votación en Parlamento Europeo termina con el cambio horario y deja que cada país decida su huso horario permanente.


¿Su cronotipo es alondra o búho? ¿su ritmo interno opera mejor en las mañanas o es vespertino y está al máximo por la tarde y noche? Pese a que los horarios oficiales se pueden acordar libremente, la tendencia mundial es a abolir el cambio de hora. El primer cambio horario se hizo en Chile en 1946 y en 1947 quedamos permanentemente con el horario de Bolivia. “El cambio horario bianual a Daylight Saving Time (DST), no genera ahorro energético neto y trae consigo consecuencias negativas para el funcionamiento adecuado del organismo humano, ya que afecta el reloj biológico diario. Estos cambios bruscos son completamente antinaturales para el ser humano, generan jetlag. Es relevante para la salud que se mantenga el mismo huso horario todo el año, sin cambios” precisa el Doctor Erwin Plett, Director de Alfa Lux y Miembro de la Comisión de Energía del Colegio de Ingenieros de Chile A.G.

Rusia, por ejemplo, abolió los cambios y se quedó en el horario de verano desde el 2010 hasta el 2014, y volvió después al tiempo estándar (horario de invierno) en sus diversas zonas horarias. En una consulta pública, gestionada por la Unión Europea el año pasado (https://ec.europa.eu/info/consultations/2018-summertime-arrangements_es) el 82% de los votantes pidió detener los cambios horarios. También se preguntó si se eliminara el cambio de horario bianual, ¿los encuestados preferirían el horario de verano permanente o el horario estándar permanente de invierno? El 56% de los ciudadanos respondieron a favor del "horario de verano permanente", mientras que sólo el 32% prefirió "horario de invierno permanente" y sólo a un 11% de todos los ciudadanos que respondieron les da igual. La semana pasada hubo una definitoria votación en el Parlamento Europeo y se decidió con abrumadora mayoría (410 contra 192, con 51 abstenciones) la suspensión del cambio horario, y ahora los ministros de transportes de la Unión Europea discuten si cada país hace lo que quiere, o se ponen de acuerdo con horarios comunes.

“En Europa al igual que en Chile los adultos prefieren que el sol se levante tarde en el invierno para tener más luz en la tarde. Aun así, Europa está mejor que en Chile porque el “horario de verano” para Europa es lo que en Chile corresponde en realidad al "horario de invierno", porque aquí transitamos entre una y dos horas por delante del huso horario geográfico, mientras que en Europa transitan entre el huso geográfico (horario de invierno) y una hora por delante (horario de verano). La falencia de la discusión está en que los más afectados son los niños y los adolescentes y ellos no votaron. Sin embargo, el cambio de hora que se avecina ahora en Chile es "el bueno" porque tendremos una hora más de sueño; además nos acerca una hora más al huso que nos corresponde geográficamente: pasaremos de dos horas de adelanto a una hora de adelanto” precisa el Doctor John Ewer del Centro Interdisciplinario de Neurociencia de Valparaíso con respecto a esas preferencias.

 

Chile no podrá tener mismo huso horario todo el año hasta el 2022 por rutina de los gobiernos de turno

“Chile perdió el año pasado la gran oportunidad de hacer lo racional, lo que muchos países ya están haciendo para evitar los efectos negativos en la salud de las personas y su productividad por los nefastos cambios forzosos de horario. Los fines de semana los humanos nos regimos por el sol y no por el dictado de los relojes oficiales, como lo muestran también los animales y las plantas que no les hacen caso a dictámenes de gobiernos. En Chile, los Magallánicos ya lograron evitar los cambios de horario, sólo que, en el peor de los husos, el de Groenlandia (UTC-3, horario de verano en Chile) y no el huso horario natural, geográfico de Chile, UTC-5, el mismo de Nueva York o Lima” concluye Plett, lamentando que en Chile seguiremos alternando los husos hasta el 2022.