La alimentación juega un papel fundamental en cualquier etapa de la vida, más aún cuando una persona realiza deporte de forma periódica o está comenzando una vida más “fitness”. Alcanzar mayor rendimiento, mejorar la masa muscular, perder peso o tener más energía son las principales causas para que alguien comience a hacer ejercicio o cambie sus rutinas para alcanzar uno de estos objetivos.
Para ayudar a conseguir estas metas, también existen algunas ayudas. “Los deportistas o quienes empiezan a hacer ejercicios necesitan cuidar su alimentación. Muchos creen que es sólo intensificar sus rutinas, pero estos elementos no son suficientes a la hora de llegar a la meta propuesta”, señala Paula Molina, químico farmacéutico de Farmacias Ahumada.
Hoy existen tipos de suplementos alimenticios que pueden hacer más eficaz las rutinas de ejercicios o conseguir una nutrición plena. “Los suplementos, en general, buscan aportar nutrientes que no podemos consumir en cantidades adecuadas con la dieta que llevamos. Éstos aportan aminoácidos, minerales, vitaminas o ácidos grasos, entre otros, pero deben ser consumidos en la cantidad requerida, ya que una dosis más elevada, puede ser perjudicial para nuestro organismo”.
En este sentido, es importante contar con la ayuda de un especialista, que guíe y entregue el contenido y dosis necesarias faltantes, más cuando se comienzan a realizar rutinas más intensas de ejercicios. “Estos suplementos no sustituyen una dieta balanceada, sólo aportan uno o más elementos que puedan faltarnos. Una dieta rica en frutas y verduras, que además integre proteínas, grasas y carbohidratos a medida no requerirá de este tipo de apoyo”, señala Molina.
No obstante, hay reglas básicas que debes seguir si te encuentras en esta etapa.
- Basar el plan nutricional en alimentos saludables. “Las dietas milagro no existen”, enfatiza Molina. La casa se debe construir en base a buenos cimientos, lo mismo sucede en este caso. Una alimentación balanceada será fundamental a la hora de conseguir logros deportivos.
- Buena hidratación. Cerca del 60% de nuestro cuerpo es agua. Cualquier reacción química en el organismo se da un medio acuoso y los músculos no son una excepción. “Por más ligera que sea, la deshidratación afectará directamente en el rendimiento, sin mencionar que está en mayor riesgo de sufrir lesiones”, destaca la farmacéutico.
- Ojo con el “Nutrient timing”. “Esto es saber qué comer antes, durante y después del ejercicio”, señala Molina. Acá pueden ser mayormente utilizados los suplementos, toda vez que se necesita proporcionar mayor energía u optimizar el rendimiento al máximo.
Sea cual sea el objetivo que se quiera conseguir, el tipo de ejercicio que se quiera realizar o los suplementos que quieras consumir, es determinante consultar por estas elecciones con un especialista. “Ellos determinarán la mejor elección de acuerdo a cada persona, considerando no sólo sus metas, sino que también el estado actual y general de su salud”, finaliza Molina.